Los expertos dicen que hay tres tipos de adictos:

Adictos a sustancias: nicotina, comida, cocaína, alcohol, drogas, marihuana, crack, heroína, etc. Adictos al comportamiento: trabajo, comida, sexo, compras, juegos de azar, teléfono celular, etc. Personas adictas o codependientes: los síntomas de un codependiente incluyen la necesidad imperiosa complacer a los demás, control excesivo sobre las personas, sufrimiento por querer resolver los problemas de los demás, poca o nula expresión de sentimientos, dificultad para establecer límites, facilidad para el chantaje e indecisión.

Los Doce Pasos de CAFE

1. Admitimos que nos falta el poder para vivir una vida espiritual plena y que nuestras vidas se han vuelto ingobernables.

2. Hemos llegado a la convicción de que solo un poder superior a nosotros mismos puede restaurarnos a la totalidad.

3. Decidimos poner nuestra voluntad y nuestra vida al cuidado de Dios, tal como lo entendemos.

4. Sin miedo hacemos un inventario moral de nosotros mismos.

5. Admitimos ante Dios, ante nosotros mismos y ante otro ser humano la naturaleza exacta de nuestra debilidad.

6. Estamos completamente dispuestos a dejar que Dios nos libere de nuestros defectos de carácter.

7. Le pedimos humildemente que nos libere de nuestros defectos.

8. Hacemos una lista de las personas que hemos ofendido y están dispuestas a reparar el daño que les causamos.

9. Reparamos directamente los daños causados, salvo que al hacerlo los perjudique a ellos mismos oa terceros.

10. Seguimos haciendo nuestro inventario personal y cuando cometemos un error lo admitimos de inmediato.

11. A través de la oración y la meditación buscamos mejorar nuestro contacto consciente con Dios, tal como lo concebimos, sólo pidiéndole que nos haga conocer su voluntad para con nosotros y nos dé la fuerza para cumplirla.

12. Habiendo tenido un despertar espiritual como resultado de estos pasos, tratamos de llevar este mensaje a todos los que lo deseen y de practicar estos principios en todos nuestros asuntos.

Las Doce Tradiciones de CAFE

1. Nuestro bienestar común es lo primero, la recuperación personal depende de la unidad CAFÉ.

2. Para el propósito de nuestro grupo sólo existe una autoridad fundamental: un Dios amoroso que se manifiesta en la conciencia de nuestros grupos. Nuestros líderes no son más que servidores de confianza, no gobiernan.

3. El único requisito para pertenecer a CAFÉ es querer enriquecer aún más tu vida espiritual.

4. Cada grupo es autónomo, salvo en las materias que afecten a otros grupos oa CAFÉ considerados en su conjunto.

5. Cada grupo CAFÉ tiene un único objetivo principal, llevar el mensaje CAFÉ a quien lo desee.

6. Un grupo CAFÉ nunca debe respaldar, financiar o prestar el nombre CAFÉ a ninguna entidad relacionada o empresa externa. Evitamos los problemas de dinero, propiedad y prestigio que nos desvían de nuestro objetivo principal.

7. Un grupo CAFÉ debe mantenerse a sí mismo, negándose a recibir aportes externos.

8. CAFÉ nunca será profesionalizado, pero nuestros centros de servicio pueden emplear trabajadores especiales.

9. Nunca se debe incorporar CAFÉ como tal; pero podemos crear juntas o comités de servicio que sean directamente responsables ante aquellos a quienes sirven.

10. CAFÉ no tiene opinión sobre asuntos ajenos a sus actividades; por lo tanto, su nombre nunca debe mezclarse en la controversia pública.

11. Nuestra política de relaciones públicas se basa más en la atracción que en la promoción, debemos mantener siempre el anonimato personal ante la prensa, la radio y el cine.

12. El anonimato es el fundamento espiritual de todas nuestras tradiciones, recordándonos siempre anteponer los principios a las personalidades.